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jueves, 6 de septiembre de 2012

PODER, de Arturo Fraga Salazar







¡¡PODER!!


            Ahora me siento bien, una vez que ha pasado todo. Ya estoy en mi clase con mis alumnos mayores que yo, mis tizas y mis libros.

            No era así cuando todo pasó. Fue tan rápido que apenas lo he digerido aún. Viene a mi mente una y otra vez el recuerdo de los hechos pero no la comprensión de los mismos.

            Pasé por casa de mi amiga, la felicité por su cumpleaños y continué andando. En el camino a la vereda de un bosque encuentro un cuchillo ensangrentado. Sé que no puedo cogerlo, las huellas, la policía… pero no me resisto, simplemente no puedo. Lo cojo y en el momento en que lo cojo ya no soy yo. La furia asesina me invade, ardo en ira y en fuego. Soy un volcán de odio. No sé contra quién. Contra todo y todos pero me acucia el deseo de matar… matar a todo lo que esté vivo, ver cómo la vida se escapa de los ojos de mi víctima…. Es tan placentero como un clímax, incluso mejor.

            Me encamino volviendo atrás sobre mis pasos. Voy decidido. No me he sentido tan fuerte, tan poderoso como ahora nunca en mi vida. Pero me falta algo fundamental, algo que tengo que terminar para ser yo mismo y sentirme aún más vigoroso, más pujante.

            Siento en mí la experiencia de siglos, de cientos de asesinatos y la febril sed insaciable que me lleva. Abro la puerta, me miro en un espejo, pero ese no soy yo, eso es un demonio…

            ─¿Volviste? ¡Qué bien! Estaba a punto de llamarte para que me… ¡¡Oye!! ¿Estás bien? ¿Te pasa algo? ¿Qué haces con un cuchillo?... ¡Y tiene sangre!

            No le dio tiempo a nada más, la hoja del cuchillo rebanó certeramente su garganta poniendo fin a sus días y mientras su vida iba desapareciendo de sus ojos yo vibraba y temblaba de supremacía… ¡¡PODER!!... ¡¡Era escalofriante!!

            Pero ahora, solo puedo recordar hechos y sentimientos y me acojono porque alguien o algo se apoderó de mí y no podía comprender nada.

            El móvil sonó. Para comunicarme la horrorosa muerte de mi mejor amiga…





Arturo Fraga Salazar

5 comentarios:

  1. Sin duda uno de los relatos más terroríficos que leí hasta el día de hoy, aún se me eriza la piel cada vez que lo leo.

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  2. Felicidades Arturo!!! me a encantado, el suspenso es envolvente... Lourdes gonzalez

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  3. Somos "yo" y algún otro. Lo peor es que ese otro nos guste más.
    Besos

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    Respuestas

    1. Virginia, no pasa nada porque el "otro" te guste más y a ese otro también. A mí me ocurre igual.

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